Cansado de vivir con los gritos, plagueos y otros maltratos, Jacinto Benítez Ramírez (49), un profesor carapegueño, decidió huir de su casa y denunciar a su propia esposa, Marilda Franco Caballero (41), por violencia familiar.
El hombre fue hasta la casa de su hermano en Ñemby, tomó valor y se acercó ayer al departamento de Atención de Víctimas de Violencia Familiar de esta ciudad y contó el supuesto calvario que vive con su esposa desde hace unos años. Benítez alegó a los uniformados que el problema principal por el que su pareja lo maltrata es porque no acepta que él trabaje de docente.
Jacinto resaltó a los intervinientes que hace unos días mantuvo nuevamente una fuerte discusión en la que la mujer lo agredió psicológicamente, como lo venía haciendo desde hace varios años, según denuncia. Incluso, señaló que, pese a que la relación se volvía insostenible, no quería dejar su casa, hasta hace poco tiempo que ya no aguantaba más ser víctima del maltrato por parte de la mujer.
La denuncia fue recibida por el Juzgado de Paz de Ñemby y la doña ya fue llamada a declarar, debido a que los intervinientes pidieron de inmediato las dos versiones del hecho.