Desde hace tres años, el camino que lleva hasta la Escuela de Colonia Thompson se encuentra destrozado y, con el último raudal, quedó aún peor, según los vecinos. La zanja ahora tiene aproximadamente medio metro de profundidad.
Una de las afectadas fue la profesora Teo Sanabria, quien tuvo que dejar su auto a medio camino e ir a pie para poder llegar hasta el colegio en el que enseña. Este hecho se repite todos los años y, a pesar de las quejas, no se les hace caso.
Los pobladores, profesores y alumnos afectados claman al intendente Horacio Ortiz Albrecht por una pronta solución y le piden que no se olvide de esa zona, pues con cada lluvia quedan prácticamente aislados.