Tendido en el suelo, con los dientes afuera y colgando aún de la cuerda estaba un perro que fue destinado a la muerte de la peor manera. El animal fue amarrado por la soga, que estaba sujeta por ramas en un extremo, y en el otro sostenía desde la mitad de su cuerpo. Así fue abandonado a su suerte en medio de malezas.
“Habrá pasado muchas semanas atado por ese árbol. Pasando hambre, sed, frío, lluvia, por mucho habrá pasado antes de fallecer. Tenía como dos días de haber muerto cuando le encontramos”, dijo Rossi Ortigoza. Ella es rescatista de animales y le apenó que el dueño del can haya preferido dejar agonizando a su mascota antes que entregarlo a algún hogar.
Añadió que el hallazgo fue casual, ya que iba solo a llevar a sus hijos al predio del Comité Olímpico Paraguayo, cuando bajaron a su perrita para que haga sus necesidades fisiológicas en las inmediaciones. La cachorra entró en la zona boscosa y su dueña le siguió.
“Inmediatamente ya sentí el fuerte olor y luego encontramos el cuerpo”, relató. Dejó al perro en el lugar para que los intervinientes vayan a verificar. Están buscando a los responsables para denunciarlos.
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