Félix Piris (31), del barrio Costa Dulce de Itauguá, se rompió la cabeza y se golpeó la cadera en un colectivo por culpa de un chofer tarova.
Eran las 05:40 de la mañana del 21 de mayo, el pasajero se sentó en uno de los asientos del medio en el colectivo de la empresa Ñandutí SRL. Cuando iban a alcanzar ruta 2, rumbo a Asunción, el conductor de la línea hizo una maniobra brusca y Félix salió despedido.
“Después de salir volando ya no recuerdo nada. Según me contaron, la cabeza la llevé por los hierros de la parte de debajo de los asientos y que empecé a convulsionar en ese momento”, relató a EXTRA la víctima.
“Me auxiliaron los pasajeros, el chofer no hizo nada, me dejó delante del Hospital de Itauguá, es lo que me comentaron”, lamentó.
A raíz del fuerte impacto, el hombre sufrió un traumatismo de cráneo y golpe en la cadera. Tuvo 8 convulsiones, según el informe médico.
Lo que más lamentó es que la empresa de transporte no se hizo cargo, lo dejaron inconsciente frente al hospital y gracias a los familiares de pacientes fue auxiliado.
“Según el protocolo que yo averigüé, el chofer debía quedarse y llamar a otro conductor para que lleve a los pasajeros”, comentó. Los personales del blanco informaron de la situación a la abogada de la empresa, pero hasta el momento no se comunicaron con el afectado.
Félix contó que actualmente está en cama, con mareos y sin posibilidad de moverse, el doctor le dio 95 días de reposo, debe hacerse varios estudios por la lesión que tuvo.
Según explicó, no pudo hacer una denuncia ante el Ministerio Público por su delicada situación, además, no puede costear un abogado.
El hombre que estaba empezando un laburo como chef pastelero y tras lo sucedido se quedó sin posibilidad de trabajar y sin ingresos. Pide ayuda para costear su tratamiento, su alias es 6532843, en la Billetera Mango.