19 may. 2024

Parroquia de Yaguarón definió al ganador del auto, pero sigue el lío

Sostiene en un comunicado que entregará el premio al señor cuyo nombre salió sorteado, pero le cañean en redes sociales.

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Jarolín se presentó en la iglesia de Yaguarón y mostró que tiene la boleta ganadora.

Revista Amóntema - Facebook (captura de video)

Se mantiene el lío sobre el ganador del automóvil recién importado, que fue el primer premio de la rifa, realizada en el marco de sus festejos patronales de Yaguarón, en el Departamento de Paraguarí, pese a que la iglesia local ya dio su veredicto al respecto.

Al final de la misa de ayer domingo, se hizo el sorteo y el número que salió estaba a nombre de Miguel Pereira, pero horas después apareció Abel Antonio Jarolín, con la boleta ganadora en la mano, sosteniendo que la había comprado, justamente del otro señor.

“Respetando el reglamento de la rifa y teniendo evidencia clara de quién fue la persona compradora original del número ganador, se hará entrega del premio a quien corresponde: el señor Miguel Pereira”, dice el último punto de un extenso comunicado, emitido por la Parroquia San Buenaventura.

En el escrito, se explica que el juego de azar fue organizado por “el Consejo Económico Parroquial, cuyo reglamento establece la numeración de la rifa como mecanismo de distribución y control los talonarios”.

Además, menciona que el sorteo se realizó en presencia de la escribana Karen Apodaca y que número premiado fue el 7358, a nombre de Miguel Pereira.

Sin embargo, el ganador no tenía la boleta en mano, por lo que comunicó la situación al Comisión Organizadora y denunció el caso ante la comisaría local, según el texto parroquial.

Además, aclara que el número fue adquirido por Pereira de un local de servicio de cobranzas, que cuenta con sistema de circuito cerrado y hay “registro del momento en el que adquirió”.

La parroquia “no es responsable de la ‘supuesta reventa’ manifestada por el señor Abel Antonio Jarolín”, añade.

Cientos de comentarios

El comunicado fue publicado en Facebook y generó cientos de comentarios y reacciones.

La mayoría opina que el premio debe ser entregado a quién tenga la boleta en mano, más allá de que en el talonario figure el nombre de otra persona.

Cuestionaron la presunta falta de seriedad del Consejo Económico Parroquial, y muchos amenazaron con que iban a dejar de colaborar con otras actividades de este tipo que llegare a organizar la parroquia.