Su nombre es Édgar Martínez, un compatriota que viajó a los Estados Unidos con una maleta cargada de sueños buscando un mejor futuro para su familia. Desde la lejanía se refugia en la poesía donde va plasmando los momentos que le toca vivir en Nueva York y lo comparte en las redes sociales volviéndose muy aplaudido por los internautas.
Édgar comentó que la pasión por la escritura comenzó desde muy pequeño y en conversación con EXTRA recordó un episodio que vivió en su época de escuelero que le marcó muchísimo. “Estaba enamorado de una compañerita del mismo grado, pero de turno diferente y lo mejor que se me ocurrió fue escribirle una cartita y tirarle por la ventana. Al otro día, la profesora Érica, comenzó la clase leyendo en voz alta mis primeros tropiezos como escritor. Quedé rojo hasta la maceta”, recordaba este talentoso paraguayo.
Cada vez que tiene un tiempo libre dentro de su ajetreada vida en Nueva York, él agarra lapíz y papel o su celular para comenzar a inspirarse creando poemas o cuentos. “Más que terapéutico, es una prolongación de mi vida. No recuerdo un día sin haber leído algo, o sin haber escrito. Es quizás una pasión”.
Cuadernos repletos
Señaló que perdió la cuenta de cuántos poemas ya escribió. “Muchísimas. Entre cuentos y poemas. Una parte desechos por mi y otros perdidos. Soy bastante desordenado. Cuadernos repletos extraviados, teléfonos llenos que perdí, en fin”.
Pero Édgar tiene una fascinación por los relatos, principalmente cuando el erotismo es la protagonista. “Voy hacia lo sensual, y por ende hacia el sexo. Pienso que la sexualidad, el goce de los sentidos, es la puerta hacia lo espiritual”.
Un anhelo que tiene nuestro compatriota es poder publicar un libro en donde recopile sus mejores creaciones, las mismas ya se encuentran publicadas en su cuenta de Instagram en donde la pueden leer y compartir (@edgarjosemartinezrivas). “Soy una persona inquieta, siempre en acción. Lo que escribo, en su mayoría, son parte de mi vivencia, así que todo va de la mano. Soy papá de tres hijos, dos nenas y un nene que están en Paraguay, por cierto, muy bien cuidados por su mamá, una persona maravillosa.
