Wilfrido y Lorena, padres de una beba de 10 meses, llevaron a su nena hasta el Hospital de Concepción, el sábado pasado, por un cuadro de fiebre y dolor de garganta. Como no había pediatra, le atendió el médico de guardia de urgencias, quien le recetó unos medicamentos.
Pasaron los días y la beba no mejoraba. Entonces, el martes por la tarde la llevaron nuevamente al puesto de salud, pero no recibió atención, porque no había pediatra en urgencias. Los padres no tuvieron otra opción más que regresar a su casa, en el barrio San Antonio de Concepción, sin que la niña alivie un poco su dolencia.
La situación de la pequeña cada vez era peor, por lo que a las 04:00 del miércoles la volvieron a llevar al hospital. Esperaron hasta las 07:00 a la doctora, pero como no aparecía tuvieron que ir hasta un puesto de salud del barrio Villa Alta. En ese lugar, la médica de guardia les dijo que la niña estaba grave y que debía ser internada.
Finalmente, regresaron al Hospital Regional cerca de las 10:00 y la internaron, pero poco después comenzó a convulsionar y cerca del mediodía falleció. La pareja denunció el caso como supuesta negligencia. Además, dijeron ser víctimas de maltratos verbales por parte de algunas enfermeras del hospital.