“Iba a ser nomás luego para mí”, dijo entre risas Regina Rosalía Britos, de 30 años, sobre su flamante esposo Alberto Medina, de su misma edad.
La pareja dio el “sí” para toda la vida en la Parroquia Santa Lucía de Villarrica, junto a otras 41 parejas, en otra boda comunitaria organizada por la Fundación Santa Librada.
Se puede decir que Regina y Alberto se conocen de “toda la vida”, o al menos, más de la mitad de ella. Se conocieron en la escuela, cuando ambos cursaban el 7° grado. Desde entonces, no se separaron.
Lo que comenzó como una gran amistad, terminó en una linda relación. Formaron un hogar hace 9 años y ahora tienen un hijo de 4 añitos.
“Mi mamá, Sabrina Vega, es servidora de la parroquia y trabaja también para la Fundación. Fue ella las que nos inculcó la importancia de dar este paso”, expresó la esposa.
Indicó que siempre fue el deseo de ambos de casarse, pero no tenían la oportunidad, ya que la ceremonia lleva sus gastos.
Comentó que a las 3:00 de la madrugada ya se deligenció para ir a la peluquería, le tocó a esa hora. “No dormí casi nada. Legalmente, nadie durmió nada, pero de los nervios”, he’i.
Otra gran historia
Agustina Aguilar, de 35 años y Victorino Báez, también de 35 años, se conocieron mediante una tercera persona en un evento. El flechazo fue de inmediato, tanto que a los 15 días de haberse conocido, ¡ya se casaron por civil!
“Vamos a cumplir 13 años ya de casados por civil y que vivimos juntos”, expresó.
Agregó que en esta década y piquito formaron una familia con cuatro hijos y ahora se le suma una bendición más. Está en la dulce espera con cinco meses de gestación. “La Fundación nos dio más que un vestido o un traje, que son hermosos, pero nos dieron apoyo emocional, espiritual”, expresó.