13 dic. 2024

Montanaro les hacía firmar un contrato a las “sumisas”

Empresario pasaba a ser el “amo” durante los encuentros sexuales.

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Luis Augusto Montanaro Bedoya (40) estará 20 días hábiles en Cibercrimen de la Policía.

Archivo

De estar en un lujoso departamento en un edificio sobre Molas López de Asunción, Luis Augusto Montanaro Bedoya (40) deberá pasar 20 días en la Dirección de Cibercrimen de la Policía. Luego, si no hay nueva resolución, pasará al penal de Emboscada.

Así lo dispuso la jueza Alicia Pedrozo luego de que el hombre, un conocido empresario, haya sido imputado por lesión del derecho a la comunicación y a la imagen de su expareja.

Montanaro filmó, vendió y difundió imágenes de un encuentro sexual sin consentimiento de la víctima.

Durante el allanamiento (jueves) en su departamento, el Ministerio Público incautó varios elementos como computadoras, juguetes y elementos sexuales.

Pero también se encontraron documentos tipo contrato en lo que el nieto del exhombre fuerte de Alfredo Stroessner, Augusto Montanaro, pactaba con sus parejas sexuales.

Tipo película

Así como en la famosa película “50 Sombras de Grey”, las personas que accedían a sus servicios firmaban un papel en donde el empresario pasaba a llamarse “amo” y la mujer “sumisa” y ésta debía comportarse “con respeto hacia el amo”.

También describían los actos no permitidos, inapropiados o peligrosos, como hacer cosas que incluyan cuchillo, sangre, orina, animales y otros.

“El acuerdo firmado es ley para las partes... En el anexo que hemos encontrado se puede leer cláusulas terribles, me refiero a sadomasoquistas, hasta diría misóginas. En una de las cláusulas se permitía todo tipo de sometimiento sexual”, dijo la fiscal Ruth Benítez a Monumental 1080 AM.

Las reglas sexuales

Montanaro, como ese personaje ficticio de la novela erótica Christian Grey, tenía sus “reglas sexuales”, que él mismo violó, sobre la privacidad

En un documento de acuerdo (el encontrado está fechado 19 de febrero de 2024) señala que “se garantizan mutuamente no padecer infecciones sexuales o enfermedades graves (VIH, herpes, hepatitis) Y en caso de adquirirlo posterior a la firma del contrato, se “compromete a informar inmediatamente”. En el contrato se llaman “Señor y Señora”.

El documentado tiene 6 páginas y 13 cláusulas.

Obligaciones del Señor

¿Qué ofrecía Montanaro? En su calidad de “Señor”, según el contrato: Será el responsable de proveer los recursos económicos para (“la señora) que será usado para diversos fines estrictamente establecidos, como compra de ropa que previamente debe ser aprobada por él. Además ejercitarse con un entrenador profesional. Elegía la pelu, los retoques de belleza y debía estar bronceada.

Condición física

Montanaro obligaba a su pareja a ser cuerachona. En el documental señala: la mujer debe mantener una imagen impecable, con un Índice de Masa Corporal (IMC) menor a 25 y estrictas condiciones de higiene.

También está obligada a comportarse tanto en la casa como en público “guardando compostura, educación y clase”, prohibiéndole fumar, beber en exceso y consumir sustancias psicotrópicas, salvo prescripción médica, según documento.

“Beneficios”

Las chicas que accedían a ser su “sumisa” tenían los siguientes beneficios:

1. Un auto o camioneta de alta gama, que no será de su propiedad. Solo tiene el derecho de uso.

2. Un 10% del ingreso que tenía el señor (Montanaro) y 40% de comisión de inversiones captadas por sus empresas.

3. Una línea telefónica a plan.

4. Plan médico.

¿Qué pasaba en caso de infidelidad?

Montaro, que aparecía en revistas como un empresario exitoso, también estipuló sanciones, en caso de incumplimiento del contrato.

Si el “amo” o la sumisa eran infieles en la primera ocasión la multa era de USD. 5.000 (G. 37.000.000), se duplicaba si se ponían los cuernos por segunda vez (USD. 10.000) y en caso de violar la confidencialidad la multa también era de 37 millones de guaraníes.

Montanaro también previó el tiempo de relación y no superaba los 90 días (3 meses) “ampliado por mutuo acuerdo”. El delito en el caso del empresario no fue sus raros gustos sexuales, sino que divulgó imágenes de su ex. La joven quedó con graves secuelas psicológicas, dijo la fiscal.

Varias chicas más se ven en los videos, la fiscal espera que se animen a denunciar.