En su retrovisor, Anderson Gustavo López Ramírez reconoció la camioneta que, de cerca, lo andaba siguiendo desde hacía un buen trayecto. Eran las 20:20 aproximadamente de ayer, domingo, cuando decidió detener la marcha y salir corriendo, en busca de algún refugio.
“Le vio en una calle vecinal y le siguió. Entonces él intentó refugiarse en una casa, pero le dispararon”, relató a EXTRA el comisario Alexander Méndez, jefe de la comisaría cuarta de Capitán Bado.
Ocurrió entre las calles República de Colombia casi General Genes del Barrio Primavera. Cinco impactos de bala alcanzaron el cuerpo del muchacho de 20 años, todos con orificios de entrada y salida.
Una llamada a la oficina de guardia de la citada dependencia alertó del hecho a los uniformados. De inmediato, personal de patrulla a cargo del subcomisario César Galeano se trasladó al sitio donde encontraron a la victima tendida en el suelo y le auxiliaron hasta el Centro de Salud Local, donde se constató su deceso.
Enseguida, los policías recibieron la información de que el autor del hecho se desplazaba a bordo de una camioneta Toyota Fortuner, que rápidamente ubicaron en la zona durante un intenso rastrillaje desplegado en la zona.
Al notar la presencia de los uniformardos, el conductor aceleró la marcha por varias cuadras al rodado. Al llegar a la avenida Presidente Hayes y la calle Bernardino Caballero, del barrio Chacoi fue alcanzado por los intervinientes.
Al mando del vehículo se encontraba Eder Rafael Escurra Espínola, de 23 años, de cuyo poder se incautó una pistola de procedencia americana que sería la utilizada para cometer el asesinato. En el vehículo varias vainillas servidas y percutidas de calibre 9 milímetros.
El comisario Méndez refirió que de acuerdo a versiones recabadas por los agentes a su cargo, se trataría de un crimen pasional. “El fallecido aparentemente andaba con la novia del muchacho de 23 años”, detalló Méndez.
De acuerdo a los datos policiales, el presunto criminal se dedica a la plantación de marihuana en la zona. El mismo se encontraba en compañía de tres menores (uno de 13 años y dos de 16), quienes serían sus “secretarios”.
El hecho fue comunicado por vía telefónica al fiscal de turno Leonardo Cáceres.