Don Angel Zaracho, de 52 años, era un viejo macatero de la zona de San Pedro y muy conocido por vender embutidos por las distintas compañías de ese departamento.
El sábado a la siesta lo mataron de dos balazos y a su secretario de 17 años, le dispararon, pero por suerte el plomo le dio de refilón. La Policía casi descarta un asalto ya que no se robaron celulares o cosas de valor de las víctimas.
Zaracho circulaba por un camino vecinal de la compañìa Careaga, cuando dos tipos en una moto modelo Trail de color azul, le cerraron el pasó y en guaraní le dijeron “epyta, epytá” (quedáte, quedáte). El señor abrió la puerta de su camión para posiblemente intentar ver lo que querían los hombres y allí ya uno le metió un tiro en la barriga; antes de caerse le dispararon en la cabeza.
Uno de los matones le dijo a su socio también en guaraní ejuka upéa (matale a ese), y el tipo apuntó al menor y le disparó hacia su cabeza. La bala, aunque fue de refilón, lo dejó noquedo, según comentaron agentes de la comisaria 3 de la ciudad de Choré.
Los asesinos pensaron que el menor murió y se fueron. Poco después llegó al lugar un poblador de la zona quien conocía al macatero y trasladó al joven y a su patrón hasta un sanatorio de la ciudad de Liberación, donde se confirmó la muerte de don Angel.
El cuerpo fue trasladado hasta la morgue judicial de Asunción para la extracción de los proyectiles que se quedaron en el cuerpo, agregan los datos aportados por agentes de la comisaría 3 de Choré.