Con el sueño de la casa propia, Liza S. (43) compró un terrenito en Capiatá. Como vive en España, le confió a su cuñado (el marido de su hermana) la tarea de pagar las cuotas, con la plata que le enviaba todos los meses.
Sin embargo, una corazonada le hizo dudar y llamó a la inmobiliaria, donde le dieron una noticia que la dejó con el corazón perere. Estaba a punto de perder la propiedad, porque dejó de pagar hacía más de 8 meses; debía alrededor de G. 14 millones.
“Yo enviaba G. 1.800.000. Le encaré y él me dijo que ellos necesitaban y yo le dije ‘¿cómo vas a necesitar si yo enviaba aparte?’ porque mi hija vivía con ellos”, contó.
Sin embargo, lo que más tristeza le dio a Liza fue enterarse de que su cuñado, a quien lo consideraba su mano derecha y un hermano más, “ahorró” su dinero para hacer una farra a lo grande por los 15 años de su hija extramatrimonial, según manifestó a EXTRA.
“Mi marido me dijo ‘eperde kuaa nomás’ porque es una plata que no va a poder devolver, porque ¿de dónde va a quitar? porque no trabaja”. Y yo estoy aquí matándome”, lamentó la doña.
Liza trabaja de lunes a viernes como interna (cama adentro) y los fines de semana cuida abuelitos. Para ponerse al día, laburó el doble y sin descanso.
“Mi hermana me dijo que supuestamente no sabía lo que estaba haciendo (su marido). Ella me contó (supuestamente se enteró después) y le echó de la casa. Yo lloré muchísimo de la rabia y le dije que me hubiese pedido bien, pero él usó el dinero de mi trabajo, de mi sudor y de mi sacrificio”, soltó.
Liza manifestó que igual a su caso hay muchísimos. La mayoría de las víctimas son paraguayas que prefieren no denunciar porque son estafadas por sus propios familiares.
Brunilda Centurión, comunicadora residente en España, contó a EXTRA que “hay madres que son engañadas por sus hijos. Se matan trabajando y sus hijos malgastan todo el dinero”, dijo.
De novela : doña volvió a España con las manos vacías
Además de Liza, su amiga que vive en España también pasó por una situación traumática, pero en manos de su hijo.
La doña mencionó que por varios años envió plata a su retoño para la construcción de una casa; sin embargo, el muchacho ni siquiera levantó los cimientos, porque usó en algo “urgente”.
“Ella volvió a España. Su hijo dijo que le chocó a una persona y le tenía que pagar (indemnizar) y no le quiso contar a su mamá“, soltó.
Secreto a voces
Enrique Barboza, cónsul paraguayo en España, señaló a EXTRA que no recepcionaron denuncias similares de compatriotas. Sin embargo, son informaciones que salen a luz a través de los medios de comunicación.
Casos muy sonados en Paraguay
-Trajo a la “otra”: Daniela Barreto, de San Pedro, enviaba plata para que su marido hiciera mejoras, pero el hombre llevó a la casa a otra mujer. Ella volvió de España, pero el hombre no la dejó entrar. Con un cartel pidió que le devuelvan la casa.
-Hija alhaja: Emilia Ortellado envió remesas por valor de G. 480 millones, para que su hija arregle la casa que tiene en Presidente Franco, pero supuestamente la chica y el novio se quedaron con la plata. Ambos fueron imputados por estafa.