María Belén Whittingslow, la joven que denunció a Cristian Kriskovich por mandarle mensajes hot, está refugiada en Uruguay luego de que la jueza Lici Sánchez ordene su captura por no presentarse a una audiencia sobre el caso de los “compranotas” en la Universidad Católica de Asunción.
La joven aseguró, en contacto con radio Ñanduti, que le persiguen porque denunció nada más y nada menos que a un miembro del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados.
“Me llega por gente que me quiere mucho una orden de captura, aproximadamente el 28 de junio, totalmente arbitraria, por parte de la jueza Lici Sánchez (...) y me deja sin defensa técnica, me quita el patrocinio de mis abogados”, expresó la exalumna, asegurando que a ella nunca le llegó una notificación para que se vaya a la audiencia.
Dijo que el 10 de junio de 2015 se desestimó la causa contra Kriskovich y que un día después le imputaron a ella por la supuesta compra de notas, siendo que las otras imputaciones a alumnos ya se hicieron en 2014.
La joven refirió estar muy triste por haber dejado Paraguay. “Voy a volver el día que pueda tener mis abogados y el derecho a la defensa”, sentenció.
El Ministerio Público, viendo los mensajes presentados como prueba de parte de Whittingslow, calificó el hecho como “cortejo y galanteo”. Cristian Kriskovich denunció a su exalumna por difamación y calumnia y pidió un resarcimiento de unos 450.000 dólares.