30 abr. 2024

“Justicieros” atentan contra la familia de cabecilla del EPP

El taller y la gomería fueron incendiados. El taller y la gomería fueron incendiados.

Los “Justicieros de la Frontera” incendiaron el domingo el taller de la familia de Manuel Cristaldo Mieres, uno de los principales cabecillas del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). Ocurrió en Correa Ruguá, zona de San Pedro del Ycuamandiyú, capital del segundo departamento. La información fue confirmada anoche por el sacerdote Bernardo Cristaldo Mieres, hermano del líder del grupo armado, quien habló con varios medios de comunicación.

“Esta tarde (ayer) se encontró una hoja donde se atribuyó el hecho un grupo criminal de la frontera, sicarios de la frontera, que amenaza a la familia, que va a pagar por la muerte de inocentes, causada por el EPP y que nos preparemos”, refirió el cura a Telefuturo.

Cristaldo comentó que en el lugar del atentado, donde además funciona una gomería, residen sus padres y dos hermanos suyos, que “están con susto”, por lo que clamó protección policial para ellos. También pidió a su hermano Manuel que desista del EPP, porque “no queremos pagar por los hechos criminales cometidos por el grupo criminal”, según manifestó.

La semana pasada, los “Justicieros de la Frontera” declararon “la guerra” al EPP, amenazando “a cada uno de los integrantes”. Fue a través de un comunicado lanzado en las redes sociales.

La amenaza

“Rueguen desde ahora por sus vidas. Ya estamos detrás de ustedes. La guerra empieza ahora”, rezaba el escrito, que circuló especialmente en los grupos de WhatsApp. El año pasado se registraron varias ejecuciones de presuntos delincuentes –a un sindicado como asaltante le cortaron la mano– por parte de los “Justicieros sin frontera”, en especial en la zona de Pedro Juan Caballero. Nadie fue detenido como sospechoso.

Piden US$ 500 mil por el colono

El EPP subió a 500 mil dólares el pedido de rescate por el colono menonita Abraham Fehr, quien permanece secuestrado desde el sábado, cuando lo capturaron en su chacra de la colonia Manitoba, distrito de Tacuatí, San Pedro. En principio, habían exigido 20.000 dólares, pero como no se pagó en el plazo, el dinero no fue retirado. El peón Silvano Pérez, liberado la noche del domingo, aún no pudo declarar, debido a que se encuentra en estado de shock, según sus familiares.

Por su parte, el fiscal Joel Cazal advirtió ayer al vocero de la Fuerza de Tarea Conjunta, mayor Alfredo Jonás Ramírez, de que se abstenga de brindar informaciones sobre el caso, sin autorización, caso contrario, será procesado.