Una familia pide justicia por la muerte de un miembro de ella, quien habría sido chocado por unos motociclistas que jugaban carreras clandestinas, sobre la ruta Marcial Samaniego, en la ciudad de Itá, en la noche del pasado sábado.
El accidente se produjo cerca de las 23:30, cuando Francisco Colmán Gavilán (56) fue a buscarle de su trabajo a una de sus hijas, debido a que a esa hora ya no hay micros y por la gran inseguridad.
El señor iba en una moto y chocó contra otra motocicleta en la que circulaban Edison López (21) y Luis Alejo Arias, quienes sufrieron lesiones leves.
De acuerdo a una testigo, un grupo de motociclistas venía por la ruta jugando carrera y uno de ellos rozó a Francisco, que circulaba en sentido contrario.
A raíz de esto, le señor perdió el control y chocó contra la moto en que iban los dos jóvenes y cayó al duro asfalto.
En ese momento, los otros carreristas le habrían pasado por encima de una sus piernas y se la destrozaron. Los mismos no fueron identificados aún.
Johana Colmán (24), docente, dijo que su papá era un señor muy bueno, trabajador, era médico naturalista, campanero de la capilla, trabajaba de albañil, en fin, de lo que sea, para salir adelante.
Añadió que gracias al esfuerzo de él ella se recibió de docente y también su hermana menor pudo tener una profesión y trabajar.
“Somos gente pobre y ahora estábamos levantando cabeza para construir nuestra casa, y un grupo de patoteros irresponsables lo mataron”, lamentó.
Hay videos donde se ve cómo un enjambre motos venía agarrando toda la ruta jugando carrera y así lo rozaron, se cayó y le pasaron encima, agregó.
No pagaron el sepelio
“En el hospital, la mamá de uno de los accidentados se comprometió con la funeraria que se iba a encargar del sepelio, pero al final se negó a pagar, porque no quisimos conciliar”, aseguró Johana.
Añadió que la mujer al final le dejó con todos los gastos.
“Queremos que la historia de mi papá salga a la luz porque era un hombre trabajador y unos vagos sin corazón quitaron su vida”, agregó.