Acompañada de una mujer, Shirley L. G., llegó hasta el supermercado Casa Rica sobre la avenida España de Asunción, donde intentaron llevarse sin pagar cuatro vinos espumantes de los más caros, pero el encargado del local pilló sus intenciones y enseguida le atrapó a la joven de 19 años.
“Cuatro champagnes equivalentes G. 3.475.000, cuatro botellas”, comentó a EXTRA el comisario Ángel Reyes.
El hecho ocurrió alrededor de las 19:30 de ayer y según el informe policial, la joven quiso llevar cuatro botellas de esta bebida de la marca Veuve Cliequot.
El jefe de la comisaría décima de Asunción manifestó que cuando Marcos Alexander Mercado, subgerente del local sorprendió a la muchacha, su acompañante corrió, por lo que ya no pudieron alcanzarla.
Mercado avisó de lo ocurrido al 911 y rápidamente llegaron al lugar los agentes de la comisaría décima, quienes procedieron a la detención de la joven, quien quedó a disposición del Ministerio Público.
Sin embargo, como la detenida no tiene antecedentes penales y, según ella, es la primera vez que comete un hecho de esta naturaleza, fue enviada a su casa en el barrio Ricardo Brugada de Asunción, debido a que tiene una criatura lactante aún; pese a que, teniendo en cuenta el valor de lo robado ya no es considerado un delito bagatelario (el Código Penal, en su artículo 172, define los hechos bagatelarios como aquellos casos de apropiación o hurto donde el valor de lo robado sea menor de diez jornales, es decir, equivalente a G. 980.890).
“Su bebé tiene 8 meses por ahí. La necesidad obliga a muchas cosas, pero hay muchas formas de sobrevivir sin cometer un delito”, lamentó el agente.