Crístofer Alexander Fretes (26) está desaparecido desde el miércoles 21 de octubre, supuestamente después de enterarse que iba a ser papá, según manifestó su expareja Liz Marlene Miranda Flores (40). Sin embargo, los familiares del joven sospechan que la mujer lo tiene secuestrado.
“Hace un mes que mi primo terminó con la señora porque ya no quería estar con ella, pero desde entonces comenzó a amenazarlo y dijo que estaba embarazada. La señora es conocida en el barrio por hacer así y una vez que regresan con ella, dice que perdió al bebé. Hasta ahora no entregó ninguna prueba que demuestre su estado”, contó Montserrat Fretes, prima del desaparecido.
El martes por la tarde, la Policía allanó la casa de la mujer en busca de elementos que indiquen el paradero de la víctima, debido a que la ubicación del teléfono daba señal en la vivienda de Liz Marlene, en el barrio Santa Librada de la ciudad de Mbocayaty, Guairá.
Según la prima, hace 4 meses que la señora conoció a Crístofer y desde entonces se obsesionó con él. “Ellos no fueron novios, la señora es loca y ella nomás ya dijo que son novios, mi primo vivía acosado por esta señora”, aseguró.
Por otra parte, mencionó que, desde hace una semana, Liz Marlene tenía el chip del muchacho y que incluso respondía los mensajes a sus amigos, que se dieron cuenta por la forma en que escribía los textos.
Una carta extraña
El tío del desaparecido contó que recibió una carta muy extraña en su taller mecánico. Está escrita en tercera persona, y empieza diciendo “Hola abuelito”, como si fuera que el bebé en camino se dirigiera al señor.
“Es raro, porque en la carta pedía que mi papá se haga cargo de la criatura, que compre frutas, verduras, medicamentos y otras cosas más. Supuestamente Crístofer es el que escribió, pero nosotros pensamos que fue la mujer”, manifestó Montse.
Hasta el momento nada se sabe del paradero del muchacho y los familiares aseguran que el joven no desaparecerá así de la nada y menos por enterarse que va a ser papá, por lo que temen que algo malo le haya pasado. Incluso, sospechan que la señora lo secuestró, para que el muchacho no la deje.