Fermina García de 39 años, una mujer que llevaba un embarazo aparentemente a término, fue hasta el Instituto de Previsión Social (IPS) de la ciudad de Hernandarias (Alto Paraná) el 21 de agosto pasado, luego de empezar a perder líquido amniótico. Pero lo que debía ser motivo de celebración, lo fue de llanto, pues según denunció su hermana, Emilce García, el pequeñito murió por negligencia médica.
Tras haber hecho la denuncia, la fiscal Natalia Montanía se encuentra investigando para saber si realmente hubo mala praxis. Según el relato, la doña llegó al IPS, con pérdida considerable de líquido amniótico y fue asistida por dos médicos y una enfermera, en un inicio.
El problema empezó cuando desde el nosocomio confirmaron que no contaban con anestesiólogo, según la denuncia, por lo que procedieron a inducirle al parto. Los familiares pidieron en reiteradas ocasiones que la trasladen a otro hospital, pero no le hicieron caso. Supuestamente no había ambulancia.
Alrededor de la 01:00 de la mañana, una de las doctoras habría confirmado al examinar a la paciente que el bebé aún estaba vivo, pero un rato después, ya dejó de moverse, y la llevaron para realizarle una ecografía. Finalmente confirmaron lo peor: el pequeñito falleció.
Posterior a eso, Fermina García fue ingresada de emergencia al quirófano, debido a que tuvo una hemorragia interna.