“Ya es tu hora, me dijo una voz, y ahí agarré el machetillo y directo me fui para cortarle la cabeza, ni no lloró”. Este es el terrible relato de F.P.G., un adolescente de 15 años que aprovechó la ausencia de su mamá para matar a su pequeño sobrino de solo 1 año y tres meses.
Todo ocurrió mientras la abuela del bebé fue hasta un almacén, para traer la cena. “Le encargué a su primo, (otro menor) para que le cuidara y que luego de despertar le llevara junto a mí, pero (el tío) le arrancó de sus brazos al bebé, le llevó a la pieza y le sacó la cabeza”, contó la abuela.
El macabro episodio ocurrió en la comunidad indígena Itanaramí del distrito de Villa Ygatimí, departamento de Canindeyú, en la noche del jueves, aproximadamente, a las 20:00.
Hallazgo
Posteriormente, el autor escapó y se llevó consigo la cabeza de la criatura, por lo que personal de la comisaría de la zona comenzó un rastrillaje por los alrededores.
Los propios vecinos relataron que vieron al chico salir corriendo de la casa con algo en la mano. Finalmente, F. fue detenido cerca de la medianoche a unos 100 metros de la casa. En su poder, los policías encontraron el machetillo y la cabeza del pequeño. El bebé estaba viviendo con la abuela, ya que el padre trabaja en una colonia alejada del lugar y su mamá se había suicidado tiempo atrás, según relatos de los familiares.
Algunos lugareños contaron que F. acostumbraba atacar a los perros del vecindario y que inclusive ya les había arrancado el cráneo a algunos.