El sol quemaba el asfalto. Eran las 09:30 del pasado domingo cuando agentes de la Policía Municipal de Tránsito se apostaron en el camino que conduce a Paso Itá, Hernandarias, Alto Paraná.
A metros de alcanzar el sitio donde estaba el control rutero, un par de motociclistas apeló a un poderoso “willy” para intentar chulear la barrera, pero a poco más de una cuadra se toparon al inspector Luis Manuel Cantero.
“Hacen el famoso ‘willy’. Van con una rueda, paran y se dan vuelta para escapar, pero a una cuadra y media estaba un agente en moto-patrulla”, contó el comisario Miguel Arévalos, de la Comisaría 5ta. local.
Los jóvenes acabaron chocando al personal de moto patrulla y fueron a parar al suelo. “Le chocan y caen ambos. El que conducía salió corriendo y quedó el acompañante”, agregó el uniformado. El conductor logró escapar metiéndose a un patio baldío.
El ataque
En el sitio quedó Marcelo Édgar Troche Arzamendia (20) quien, al verse acorralado, extrajo de su cintura un feroz cuchillo y le jugó al cuerpo del “zorro” dos veces, sin lograr alcanzarlo. Cantero rápidamente pidió apoyo a los efectivos de la mencionada dependencia policial que estaban cerca del lugar y así lograron reducir al joven.
¡Oh, sorpresa!, se llevaron los policías una vez que Mauricio fue trasladado a la comisaría. El veinteañero arrastraba dos órdenes de captura por reducción y robo agravado, informó Arévalos.
De su poder incautaron el arma blanca y la motocicleta en que se desplazaba. El detenido quedó a disposición del Ministerio Público.
Creen que serían motoasaltantes
El comisario Arévalos mencionó que, considerando la orden de captura que pesaba en contra de Troche, tienen la sospecha de que Marcelo y su compañero se encontraban “pescando” algún incauto para cometer robos. El detenido ya fue imputado por robo y reducción. La Fiscalía solicitó su prisión preventiva. “Solo esperamos la orden del juzgado”, refirió el uniformado, quien añadió que están tras los pasos del cómplice, un tal Gabriel González.