Un extraño caso se vivió en Hernandarias luego de que Francisco Peralta Rotela, alias Pachi, de 28 años, desapareciera por casi 24 horas. El joven fue hallado con vida en una zona boscosa del asentamiento Miguelito, cerca del río Acaray, sin remera y con raspones en todo el cuerpo por haber pasado el día entre los yuyales.
El hallazgo se produjo cerca de las 22:30 de anoche, cuando agentes de la Comisaría 27ª recibieron información de los vecinos quienes vieron al joven y avisaron que podría estar escondido en la zona. Al llegar, lo encontraron caminando entre los árboles, sin lesiones graves pero visiblemente cansado y asustado.
Según relató Pachi, dos hombres desconocidos llegaron frente a su casa en un auto Volkswagen Gol, color gris. Pensando que eran clientes de su cancha de vóley y despensa, salió a saludarlos, pero los sujetos intentaron alzarlo por la fuerza al vehículo. Logró zafarse, rompió su remera y corrió al bosque, donde se escondió hasta que pasó el peligro.
“Saltaron por mí, rompieron mi remera, pero logré zafarme y corrí al monte. Me escondí todo el día sin comer ni tomar agua”, contó el joven a los policías.
El joven contó que cree que los desconocidos pensaron que tenía dinero, ya que trabaja en el Brasil y además realiza pequeños préstamos a conocidos. “Capaz creyeron que tenía plata”, dijo.
Versiones que no coinciden
La pareja de Pachi, Clara Estela Agüero Insfrán, declaró que vio cuando su novio subió al auto voluntariamente con los dos hombres, quienes la saludaron en guaraní antes de irse. Sin embargo, testigos aseguraron que el joven huyó corriendo de los desconocidos.
Por esas contradicciones, la fiscal Beatriz Adorno ordenó inicialmente la detención de la mujer, aunque luego fue liberada. Los investigadores creen que las diferencias en el relato se debieron al susto del momento.
La fiscal dispuso que el joven fuera sometido a una inspección médica y permanezca bajo resguardo policial para garantizar su seguridad. También deberá declarar nuevamente ante el Ministerio Público.