Shirlye Santacruz, la madre del pequeño de 5 añitos cuya muerte se comprobó que fue a causa de asfixia, provocada con una almohada o con toalla, habló con los medios de prensa.
La mujer insistió en que fueron dos delincuentes quienes entraron a su casa y uno mató al niño. “Los chespiritos no te van a salir por donde hay cámaras”, respondió ante la consulta de por qué no se vio a nadie entrar ni salir en los circuitos cerrados.
“Mi hijo es mi vida, mi único motor de mi vida”, dijo la mamá.
Señaló que uno de los tipos dijo “jaha, jaha porque ko mitã’i ndoku’eveima”, y allí salieron sin llevarse nada de la casa.
Negó que ella haya sido quien acabó con la vida de su hijo. Agregó que los chespis golpearon la puerta y ella abrió pensando que eran los albañiles que estaban trabajando.