Esta tarde se produjeron incidentes en la sala de juicios orales de la Corte Suprema de Justicia, protagonizados por familiares de Esteban David da Silva Almada, quien fue condenado a 30 años de cárcel, por el feminicidio de su esposa, Cinthia Carolina Escobar Almada.
El cuerpo de la mujer había sido decapitado, desmembrado y le sacaron algunos órganos internos. El horrendo crimen había ocurrido en Villa Hayes (Chaco), el 21 de enero del 2016.
Al leerse la condena, varios de los allegados de Da Silva empezaron a gritar “¡Justicia!”, intentando llegar hasta los miembros del tribunal, pero fue fueron atajados por policías, quienes formaron un cordón de seguridad.
Entonces, se tomaron con los parientes de Cinthia Carolina, quienes pidieron ayuda, a través de las radios, porque no podían salir de la sede judicial.
“No podemos salir de acá, justamente por falta de garantías, porque ellos (familiares de Da Silva) nos están amenazando; estoy con mi familia acá. Eso es lo primero que le pido a la prensa y al Ministro del Interior también”, dijo en la 650 AM, Carlos Escobar, padre de la víctima fatal.
Escobar aseguró que ya lo atropellaron. “Acá dentro de la Corte se metieron; se está poniendo peligrosa esta gente”, alertó.
El juicio oral y público se había iniciado en la ciudad de Villa Hayes, pero se trasladó al Palacio de Justicia de Asunción, justamente, para brindar mayor seguridad a la diligencia y por la gran cantidad de testigos que había en el caso.