El intercambio de regalos es el momento más esperado del Día de la Amistad.
Sin embargo, no todos tienen el mismo interés en el juego del Amigo Invisible, por lo que más de uno termina desilusionado.
“El año pasado me regalaron ese alfajor que se vende en el semáforo a 2 por G. 5.000”, dijo un trabajador en un video que se hizo viral en Tik Tok. Y, al parecer, es algo que sucede con frecuencia.
En el trabajo, en el colegio y en la facultad “marcan” al compañero que siempre lleva regalos baratitos. A viva voz luego dicen que no quieren ser el “afortunado amigo invisible” del fulano.
Por eso, algunos grupos de mejores amigos acuerdan cuánto debe ser el valor mínimo del regalo.
Gianina Galeano, mamá de un adolescente, dijo las instrucciones fueron no gastar menos de G. 50.000.
Lejos de enojarse, la señora señaló que la idea le pareció muy buena.
“Hablaron entre ellos sobre cuánto debe costar para asegurarse de no recibir regalos feos”, dijo.
La doña pidió a los papis no ser tacaños. “No hay que comprarles cualquier cosa nomás porque después son ellos los que pasan vergüenza y les hacen bullying”, señaló.
Ale Díaz, de 28 años, manifestó que es la mejor manera de mantener la tradición del Amigo Invisible. “Algunos invertimos en algo lindo y terminamos recibiendo llaverito o chocolatito. Eso no da gusto”, expresó.
El joven dijo que ningún regalo decente puede costar menos de G. 30.000.
El grupo de mejores amigas de Analía Martínez hace tiempo utiliza esta estrategia.
“El año pasado los regalos debían ser ropa para gimnasio, así nos aseguramos de todas recibir regalos bonitos y no hacer muchas diferencias”, apuntó.
Este año acordaron intercambiar servicios de belleza.
“Puede ser algo del spa, pestañas, uñas. Hay muchas promociones, entonces acordamos en cuál ir”, dijo.
Las amigas gastarán un promedio de G. 60.000 a G. 100.000 en sus regalos.
Hoy puede ser el último día para ir a comprar el regalo del Día de la Amistad. Muchos ya lo hicieron y hasta tuvieron que comprar más de uno.
Hay tiendas de regalos que hoy están tirando la casa por la ventana.
Entre los regalos menos deseados están las tazas y las medias, pero es sólo cuestión de gustos. Recordá que lo más importante es compartir.