Un grupo de entre 15 y 20 personas, fieles al sacerdote Félix Miranda, fueron hasta la casa de la profesora Olga Martínez a escracharla por haber ayudado al adolescente cuando sufrió el abuso. El niño de 12 años había acudido a ella para contarle que fue abusado por el pa’i, en Edelira, Itapúa.
Martínez se disponía a salir de su casa para llevar a su madre enferma hasta un centro asistencial, cuando la turba de “religiosos” le obstruyó el paso.
Además, la Policía no quiso tomar la denuncia porque supuestamente todos pueden manifestarse libremente. La docente anunció que presentará denuncia ante la Fiscalía y llevará el video que tiene como evidencia.