Muchos recordarán el polémico caso de Enrica Locatelli (43). La italiana que resultó ser paraguaya y que había sido dada en adopción en la ciudad de Pilar a una familia de Italia, por lo que vivió en Europa todos estos años.
Finalmente, luego de situaciones confusas y la aparición de un supuesto hermano, que al final no era, Enrica pudo reencontrarse con su verdadera madre y hermanos.
Tras 43 años, doña Celsa Villasanti (57), su madre biológica, le dio el añorado abrazo, luego de que una prueba de ADN diera positivo. Enrica llegó al país el viernes y doña Celsa ya le esperaba con algunos de sus hijos en el aeropuerto Silvio Pettirossi.
“En mi corazón había un vacío, un hueco muy grande que duró 43 años. Son 43 años que viví dolida. Con ese abrazo, se cerró ese hueco”, dijo a EXTRA ña Celsa.
Ella era muy joven cuando se embarazó, y con solo 14 años prácticamente le arrebataron a su hija de sus brazos. “Una tía mía fue la responsable. Junto a unos sacerdotes me entregaron a mis padres adoptivos”, relató por su parte Enrica a EXTRA.
Enrica mandó a hacer las pruebas de ADN utilizando la saliva de su mamá y haciendo las comparaciones en un laboratorio de Italia. “Antes de conocerlos y venir a verlos, mandé a traer esas muestras desde Paraguay hasta acá y salieron positivas”, mencionó.
“Este encuentro para mí fue emocionante. Es algo que anhelaba mucho”, dijo.
Además Enrica se encontró con algunos de sus cinco hermanos. Su idea es llevar a su mamá a conocer Italia, a fin de que conozca su vida allá, además de a su pequeñita de seis añitos y al esposo. En Italia ella es fisioterapeuta.
En su lecho de muerte, su madre adoptiva le había contado toda la verdad y fue ahí que decidió emprender vuelo al país y buscar a su verdadera familia. En el año 2021, el caso causó revuelo tanto acá como en Italia.