¡El colmo! Una estudiante de 27 años, que fue víctima de inseguridad, recibió un insólito reclamo por parte de su asaltante.
El caso ocurrió en Ponta Porã, Brasil, pero también tuvo un capítulo en el lado paraguayo.
Según el informe de medios brasileños, ocurrió el pasado miércoles 30 de abril. La universitaria estaba en su auto, un Fiat Uno, cuando un delincuente la sorprendió y se subió al rodado junto a ella.
El sujeto estaba armado y le dijo que no perdiera la calma, que necesitaba que lo llevara hasta un lugar. A unos kilómetros, le ordenó a la joven que detuviera el vehículo y él tomó el volante.
Se detuvo en un comercio y obligó a la víctima a retirar 2500 reales (alrededor de G. 3.500.000). Mientras esperaba, el malevo compró una bebia.
Después, pasaron al lado paraguayo, donde la señorita fue obligada a adquirir un celular de la marca Xiaomi. pagó con su tarjeta de crédito 515 reales (G. 800.000).
Luego de hacer las compras, la víctima rogó a su captor para que la libere porque debía asistir a clases. Entonces, el malviviente la llevó a su casa para que retire sus útiles y mientras la esperó en el auto, y dejó de ella su celular. Le dio 10 minutos para regresar y la joven así lo hizo, según el relato
Luego el hombre dejó a la joven cerca del colegio y huyó con el vehículo, relata el portal Campo Grande News.
Pero la pesadilla de la estudiante no terminó ahí. El agresor le mensajeó por WhatsApp a la víctima para preguntarle por qué no funcionaba la tarjeta de crédito que el había robado. El tipo había hecho compras por un total de R$ 1.370 (cerca de los 2 millones de guaraníes), casi todo el límite de la tarjeta.
Asustada porque el sujeto conocía hasta su casa, la estudiante hizo la denuncia. El vehículo fue recuperado en la mañana siguiente en Ponta Porã.