Desde hace 40 años, doña Ángela Alderete (78), es fiel devota de San Blas, luego de que el santo le apareció en sueños y le indicó qué remedio yuyo preparar para curar a su hijo que tenía tiricia y, desde entonces, cada año hace un karu guasu para todo el barrio Mariscal López de Piribebuy.
A ña Ángela le ayuda su hermana Estelvina (72), hasta el año pasado lo hacía también Silvina (82), quien lamentablemente falleció hace un mes y cuya ausencia se sintió en medio de los preparativos. “Ayer le busqué mucho a ella, me hace mucha falta”, dijo ña Ángela, recordando a su hermana mayor, las tres son consideradas “cocineras de San Blas”.
Ayer ella y ña Estelvina prepararon tallarín de 20 gallinas y además el famoso so’o ku’i arroz, de 40 kilos de carne de chancho y 15 kilos de arroz. “Este año, por la pandemia fue diferente, la gente solo venía a retirar y llevar, ya que para evitar aglomeración no podían comer acá, en casa”, dijo la doña.
“Mi promesa es que voy a seguir haciendo esto, hasta que Dios me lleve con él”, dijo ña Ángela que hasta ahora muestra el agradecimiento al santo por curar a su hijo enfermo. “Él hasta ahora está conmigo, gracias a San Blas”, agregó la devota.