El flechazo fue inmediato. Elena Arce sintió que su corazón se aceleraba cada vez más al ver que Inocencio Farías, un elegante caballero, se acercaba a ella.
Era el moreno más alto y apuesto que alguna vez haya visto, según recuerda. Tenía 18 años cuando por primera vez supo lo que era el amor.
Ambos se conocieron en una fiesta en Jhugua Zarzo, distrito de Paso Horqueta, Concepción, y ese mismo año, el 13 de septiembre de 1971, se casaron. Elena, de 67 años, e Inocencio, de 75, solo esperan seguir juntos y disfrutar de su amor.
El sábado cumplieron 50 años de matrimonio y junto a sus 9 hijos, todos profesionales, y 7 nietos, festejaron sus Bodas de Oro.
Una misa fue celebrada por el pa’i Pastor Farías, hijo de la pareja. Elena e Inocencio se pasearon en una carroza escoltada por jinetes. Ella estaba vestida de blanco, tenía un ramo de rosas y él una camisa y corbata. Los hijos se vistieron igual: las nenas con vestidos color fucsia y los nenes con camisa de ao po’i color verde agua.
Elena contó a EXTRA que la primera vez que vio a Inocencio supo que sería su compañero de vida, pero cuando él la invitó a bailar, lo rechazó porque le ganó la timidez, según contó Elena en guaraní.
Desde aquella vez ya no lo volvió a ver hasta que un día, en una carrera de caballos ambos coincidieron y comenzaron a hablar. Inocencio le pidió matrimonio y ella le dijo que sí.
Consejo
La pareja salió adelante gracias a la agricultura y la venta de queso. Elena dijo que la base de todo matrimonio debe ser la comprensión y por sobre todo el respeto mutuo
“Cuando te casás no todo es color de rosas, se pasa por muchas dificultades, pero hay que saber aguantar. Si hay peleas, hay que salir un rato para que pase el enojo porque sí o sí uno va a yerar”, expresó Elena.