Pobladores del barrio Kennedy de Capiatá festejaron ayer con un asadacho comunitario que desde hace un año le hacen 6-0 a delincuentes en la zona.
Esto, debido a que crearon entre todos una comisión de seguridad que trabajaba en redes entre vecinos, en coordinación con la Policía y la Fiscalía. Es decir, ante cualquier denuncia, todos están en alerta para que el malevo no escape.
Alberto Vian, coordinador de la comisión, contó a EXTRA que gracias a esta organización lograron eliminar el 70% de la inseguridad en el barrio.
En ese sentido, los lugareños ya pudieron volver a salir a trotar a la tardecita por el barrio, tomar tereré tranquilamente en la vereda de sus casas y caminar por las calles sin miedo, actividades que antes eran casi imposibles por la gran cantidad de asaltantes en la zona.
“Nos manejamos con distintas bases de seguridad, en conjunto con el puesto policial. Cada vez que ocurre una situación, la denuncia llega mucho más rápido”, explicó el líder del grupo.
Resaltó que todas estas bases son monitoreadas por mapas, por lo que esto facilita la detención del maleante.
Cómo se manejan
Alberto aclaró que esta comisión es diferente a las famosas “comisiones garrotes” que se arman en muchos barrios.
“La comisión garrote ya es extremo, tampoco somos pyragüé. Lo que hacemos es trabajar en conunto con la Policía”, indicó Vian. Otras funciones que tienen es atender los problemas sociales del vecindario y realizar actividades para ampliar recursos y fortalecer su comisaría. También hay representantes que se encargan de hacer seguimiento a casos ocurridos, para que el delincuente reciba un castigo ante la Justicia.
¿Cómo funciona la comisión de anti-malevos?
La Comisión de Seguridad se maneja por bases, constituidas por grupos de vecinos, quienes tienen contacto directo con la Policía y la Fiscalía ante cualquier hecho delictivo.
En el barrio Kennedy, el equipo se denomina “Seguridad ciudadana” y está en red con otros grupos parecidos de Ñemby y Fernando de la Mora. Indican que no solo actúan en casos de asaltos, sino también ante denuncias de violencia familiar.
A fin de que la Comisión de Seguridad Ciudadana siga en pie, los vecinos decidieron dar un aporte mensual de G. 20.000 a la organización. Con este dinero pagan los gastos de control diario.