En medio del reguero de sangre, paredes manchadas, el humo y destrozos en la matanza en el piso 15 del edificio Castillo de Diamante, en Ciudad del Este, un héroe rescató a una niña de 4 años.
El bombero Juan Daniel Bonilla, voluntario de Ciudad del Este, contó a EXTRA que cuando subió los 15 pisos la noche del sábado tenía una misión clara: revisar baño por baño para encontrar a la chiquita.
“Antes de subirme hablé con ciudadanos orientales y me insistieron mucho en que una menor de edad estaba en el baño”, relató.
Todo el piso 15 era un solo departamento, había muchísimos sanitarios, en cada dormitorio y sala había baños, detalló.
“En un momento llego a una puerta que estaba trancada con llave por dentro, con una patada abrí, vi que era un dormitorio y fui al fondo, golpeé la puerta del baño. Escuché que la niña hablaba, cuando iba a romper, me dijo la mamá que iba a abrir”, contó el rescatista.
Inmediatamente la chiquita abrió los brazos, dispuesta a subirse con su héroe en aquella masacre. La mamá estaba muy herida, con varias puñaladas en la espalda, el hombro y la cara. “Probablemente le abrazó a su hija y corrió a encerrarse, en ese ínterin posiblemente le hirió”, detalló Bonilla.
“La niña estaba muy agitada, cuando le iba a sacar debíamos pasar por el charco de sangre, entonces le tapé la cara”, recordó. Con la pequeña en brazos, bajó los 15 pisos, pese al humo, y cuando por fin pudo entregarla a los profesionales de salud, sintió la satisfacción del deber cumplido.
Bonilla informó que la tarea fue muy compleja, esa noche de terror 40 bomberos voluntarios de Ciudad del Este y cuarteles de zonas aledañas colaboraron.
Los residentes de los demás pisos evacuaron cuando llegó la noticia de que en el 15 estaba ocurriendo una masacre.
Una de las víctimas fatales intentó salvarse y se arrastró hasta la entrada del departamento, el hombre fue rescatado, pero falleció en el hospital.
El fiscal Alcides Giménez Zorrilla informó que se remitieron pedidos de informes a la Interpol, el grupo Antimafia China, la Dirección de Inteligencia de la Policía Nacional y Migraciones para identificar a las víctimas, cuyos cuerpos están en la Funeraria Buen Jesús. El joven chino Jack Cheng Luo (25) asesinó a 4 de sus paisanos y luego se tiró al vacío: falleció poco después de ser auxiliado.