La bebé de ocho meses prácticamente ya no respiraba. La criaturita se había atragantado con su saliva y sus padres, desesperados, no tuvieron mejor idea que llevarlo hasta el cuartel de bomberos que era lo más cercano que tenían de su casa. Ocurrió en Pedro Juan Caballero, departamento de Amambay.
A bordo de un automóvil llegaron la mamá y otros parientes. La mujer bajó con la bebita en brazos y para fortuna suya, el voluntario Hércules Ulcedo estaba en la estación de los azules, quien además de ser bombero también es médico de profesión.
El médico tomó a la niña en brazos y luego de utilizar técnicas especiales para estos casos (golpecitos en su espalda), ella volvió a respirar al igual que sus familiares. De allí fue trasladada hasta el hospital Regional donde quedó bajo observación en el servicio de pediatría.
Hércules, de nacionalidad brasilera, desde hace años vive en la capital norteña. Llegó para estudiar medicina y adoptó a nuestro país como su nueva y segunda nación.
Aquí el vídeo del momento en que el bombero salvó a la niña: