El presidente electo del Brasil, Jair Bolsonaro, no quiere saber nada de las chapas unificadas de vehículos para el Mercosur, alegando que solo va a traer trastornos y gastos para los propietarios de los rodados. Incluso habló de las “patentes bolivarianas”, para rechazar la iniciativa.
La fecha tope para la unificación, que propone afectar a unos 100 millones de vehículos, ya fue aplazada tres veces. El nuevo plazo de adecuación era diciembre del 2023 para Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay. Pero con la postura anunciada por Bolsonaro ayer lunes nuevamente todo el tema queda en duda.
“Esas placas no son de interés nacional. En lo que depende de mí, vamos a poner un punto final a eso si hay una forma legal”, sostuvo entrevistado por la Rede Bandeirantes, en su casa de Rio de Janeiro ayer lunes.
La idea de la placa única era para facilitar la circulación y mejorar la seguridad con la creación de un banco de datos único. Pero el nuevo presidente brasileño afirma que “esa unificación de placas del Mercosur solo va a traer transtornos para nosotros y más gastos para los propietarios de vehículos”, por lo que pidió un mejor estudio, agregó.
Sostuvo que el acuerdo nació de los “intereses de la gran patria bolivariana”, por lo que el cambio no es bienvenido, enfatizó, según publica el sitio de Jornal do Brasil.
La participación del Brasil en el Mercosur de hecho es un tema que inquieta a los integrantes del bloque. Las dudas habían empezado ni bien se confirmó el triunfo de Bolsonaro, cuando su futuro ministro de Hacienda Paulo Guedes había anunciado que el Mercosur no iba a ser prioridad para el nuevo gobierno.