Una mamá que estaba con dolores de parto llamó a la comisaría 39 Central para pedir una ambulancia. Ante esta situación, la subficial Marisol González subió a la patrullera y se dirigió a la compañía Potrero Guazú, de Itauguá, para auxiliar a la embarazada.
Al llegar, la uniformada encontró a la señora ya a punto de dar a luz. Ante la demora de la ambulancia, la alzó al móvil y aceleró hacia el Hospital Nacional. Pero el bebé ya no podía esperar y nació dentro de la patrullera, con 2.730 gramos.
Tanto la mamá como el recién nacido fueron trasladados hasta el centro asistencial, donde se constató que ambos están en perfectas condiciones. El llamativo suceso ocurrió en la tarde del martes.