Un albañil denunció en una comisaría que se fue a reclamarle a un cliente para que le pague por un trabajo que le hizo y que, en vez de recibir unos billetes, ligó un tongo fuertísimo en la cara.
Ricardo Javier Cabrera Montero, de 35 años, se acercó a la Comisaría 36 del barrio Santo Domingo, de Encarnación, a denunciar la agresión que sufrió.
El señor habló con los agentes y contó que se fue al domicilio de Quintín González, par a pedirle que le pague por un trabajo que le hizo en la semana.
Violento
Recordó que se bajó de su moto, golpeó con las manos y salió Quintín. Tras saludarlo, le dijo que se iba para llevar los G. 640.000 que le debía por el laburo realizado.
El denunciante afirmó que eso le molestó al dueño de casa, quien salió y le metió un tongo en la cara y luego ingresó a su vivienda. El trabajador no sabe si el tipo estaba drogado y si es que reaccionó así porque estaba alcoholizado. Asimismo, dijo que él necesita que Quintín le pague esa plata ya que dejó otros trabajos para cumplir con él.
Abogado
El hombre también mencionó en la base policial que se iba a acercar a la Fiscalía de Encarnación para denunciar la agresión que sufrió.
Su denuncia posiblemente no iba a correr allí porque lo que sufrió no es lesión grave y el Ministerio Público no da curso a estos hechos (debe haber querella).
El albañil, para demandar a Quintín, debe contratar un abogado, lo que casi no es posible para él por el alto costo.
Disconforme
Los agentes de la comisaría interviniente señalaron que al parecer el trabajador primero llegó a un acuerdo con el dueño de la casa para hacerle un trabajo de una manera y al final la terminación no fue del gusto del cliente.
Por eso Quintín le habría reclamado al albañil y este le respondió de una manera que molestó al “patrón”, quien salió y agredió al visitante.
El acusado no se acercó a la dependencia policial a dar su versión sobre el incidente, según explicaron los uniformados.
Agregaron que episodios como este, en que un albañil es agredido por el cliente, no se da con frecuencia en esa zona.
“Si llegan hombres con lesiones que sufren en peleas en canchas, las denuncias son enviadas a la Fiscalía, pero al final no pasan de ser denuncias que acaban en el oparei”, dijeron.
Discusiones memete
Gloria Jara (49), pobladora de Puerto Botánico, Asunción, contó que muchas veces ya le perdió la paciencia a los albañiles que contrató y reconoció que tuvo ganas de “corregir” a alguno que otro.
Ya contrató a seis albañiles este año. “Algunos piden por adelantado la plata y luego no vienen en días. Otros trabajan un poco y después no vienen más, se van a hacer otras changas”, dijo. Añadió que los lunes son un “dolor de cabeza” porque no aparecen temprano.
“El último que contraté me hizo un baño y, como yo no entiendo, no le puso ni ventana. Además había sido no le hizo la caída al piso y el agua no corre. Le reclamé y me dijo que iba a solucionar. Pasaron los días y ahora ya me bloqueó en el celular”, dijo.