La brasileña de 18 años invitó a sus amigos y compañeros de cole al festejo de un cumpleaños familiar, en su casa situada en la ciudad de Pedro Juan Caballero. En la madrugada, la mayoría ya se había retirado, excepto un muchacho de 19 años.
Eran las 00:30 del sábado, cuando el joven ya con algunas copas de más encima se acercó a ella y la obligó a ir a su pieza, aprovechando que ella también estaba pasada de tragos.
Allí intentó seducirla, pero ante su negativa, le atajó ambos brazos y la sometió sexualmente.
“Posteriormente, el autor abandonó el lugar, se dio a la fuga hacia el lado Brasil”, indicó a medios locales el comisario Pedro Román, jefe de la comisaría primera hasta donde acudieron familiares de la víctima para denunciar el hecho.
Los uniformados avisaron del hecho al fiscal de turno José Luis Torres, quien ordenó que la brasileña sea llevada hasta el hospital regional para su inspección médica. Allí fue sometida a una revisión ginecológica por parte de la médica Alice Gayoso, quien constató que presentaba rastros de abuso.
También participó en la inspección personal de criminalística, que levantó las evidencias del caso.