En una charla escolar sobre prevención de abusos sexuales, una alumna de 13 años se quebró en llanto y reveló un pesado secreto.
Conversando con la profesora y directora de la institución, de Encarnación, la estudiante señaló que fue abusada sexualmente y además quedó embarazada.
La adolescente no aportó detalles, pero fue suficiente para las docentes. Dieron aviso a la Codeni y luego al Ministerio Público.
En la Fiscalía descubrieron que los padres de la alumna realizaron una denuncia de abuso sexual hace 15 días. Acusaron a un tal “Eduardo”, pero no dieron apellido ni otra información.
La fiscala Zulma Britos habló con la abuela de la víctima, quien tiene una casita en el mismo terreno que su hija, señaló a su yerno (papá de la adolescente) como el supuesto autor del abuso.
El hombre quedó detenido mientras la investigación continúa. La víctima tendría unos 3 a 4 meses de embarazo.
Un caso similar ocurrió en Remansito (Villa Hayes). Una estudiante de 11 años dijo a su profe que su padrastro “le hacía cosas que dolían y no le gustaban”. La Fiscalía rescató a la nena de la casa y quedó a cargo de una profesora por el momento.
El padrastro fue detenido y la mamá dijo a la fiscal Irán Suárez que “no es la primera vez que su hija dice eso”.
Denuncian a profesor
Estudiantes de un colegio de Itá denunciaron que un profesor, entrenador de la bandaliza, invitó a todos a una farra en su casa.
Los miembros de la bandaliza fueron y tomaron bebidas alcohólicas. Más tarde el instructor se ofreció a acercar a algunos de los chicos hasta su casa. En el camino, habría manoseado y besado a la fuerza a la adolescente.
Los dos compañeros de la chica fueron testigos, pero defendieron al profesor cuando ella hizo la denuncia en el colegio. Sin embargo, otro grupo de estudiantes sí apoya a la víctima.
Organizaron una manifestación, que debía realizarse ayer, pero lo suspendieron debido a que el director de la institución prometió que realizaría las denuncias pertinentes. Los alumnos quieren que el entrenador sea despedido.