Tras descubrirse que una nena de 12 años estuvo en la habitación privada con un interno de la Penitenciaría Regional de Emboscada, el fiscal Gedeón Escobar imputó al hombre por abuso sexual en niños, mientras que a la mamá de la víctima decidió imputarla por violación del deber de cuidado y por complicidad con el presunto abusador.
El Ministerio de Justicia denunció el domingo el hecho, calificándolo de supuesto proxenetismo, porque fue la misma mujer quien llevó al penal a su propia hija, y después, en la inspección médica, se constató que hubo abuso contra la menor de edad.
Según informes recabados, la señora alegó que la niña tenía una “relación sentimental” con el interno antes de que éste se fuera a la cárcel.
La doña quedó detenida, mientras que la víctima menor de edad recibió asistencia de un psicólogo del Ministerio Público y su papá fue llamado para retirarla.