Monedita tras monedita, y alguno que otro billete, fue juntando Pascual Ledesma en su alcancía. Pero...¿qué quería hacer con el dinero?
Cualquier niño de 5 años, la edad que tiene Pascual, pensaría en comprarse un enorme camión o una pelota, sin embargo, este pequeño decidió entregar todo lo que ahorró a sus hérores: los Bomberos Voluntarios de Villa Elisa.
Sorprendidos, los “amarillos” recibieron el obsequio de fin de año que les llevó el propio Pascual para que pudieran cargar más combustible a su carro y así seguir salvando vidas.
“Cada acto de bondad hace mejor al mundo...”, publicaron en la página de Facebook de los Bomberos Voluntarios 9na. Compañía de Villa Elisa, agradeciendo a Pascual por donar la suma de 61.600 guaraníes.