Con un poco de paciencia ese zapato que tanto te gusta y te queda chico, podés volver a usarlo. Quizás alguna vez fuiste a una tienda y te gustó mucho un zapato, pero no tenían tu calce o viste una prenda, pero era una talla más. No te preocupes y animate a comprarla igual: con un poco de agua tibia y un secador de pelo, podés solucionar ese inconveniente.
Agrandar zapatos
Ponete medias gruesas y meté el pie en el calzado, mové los dedos del pie (como haciendo lugar por dentro) y mientras, por fuera, con el secador de pelo calentá la parte delantera y trasera del zapato, por unos minutos.
Achicar zapatos
En materiales de cuero natural y sintético, con una brocha, humedecé el calzado con un poco de agua. Con ayuda de tus dedos y un secador de pelo, estrujá el zapato para que no se deforme (tenés que llevarlo puesto).
Agrandar ropa
Meté la prenda en un recipiente, echale 1 litro de suavizante por cada 4 litros de agua y dejala en remojo un día entero. Después tendela para que se seque, pero sin torcerla.
Achicar ropa
Colocá tu prenda en una olla con agua y hacela hervir, retirala y metela al secarropa en su máxima potencia, fijate cómo va quedando la ropa, mientras va secándose.