En el verano es normal que el uso de acondicionadores de aires y electrodomésticos aumente, pero esto podría causarte serios problemas si no regulás el uso de tus equipos. Acá te damos unos tips que la ANDE publica para evitar que pagues demasiado.
1- Apagá la computadora: si no la vas a utilizar, conviene que no esté funcionando. Cuanto menos tiempo esté encendida, más platita te ahorra.
2- Aprovechá la luz natural: no te pases encerrado en la pieza utilizando las luces artificiales. De día, eso representa un gasto innecesario.
3- Regulá la temperatura del agua caliente: el uso del calefón para la producción de agua caliente supone la mayor parte de la energía consumida en una vivienda, el 66%.
4- Reducí el uso del acondicionador de aire: no hace falta que lo dejes funcionando toda la noche, podés programarlo para que funcione solo por unas horas.
5- Disminuí el uso del lavarropas: si hay buen clima, es recomendable lavar las ropas a mano.
Es importante elegir un aparato que tenga programas cortos y de lavados con agua fría, ayudan a reducir hasta un 25% en el tiempo de lavado y en la energía consumida.