El cronista Jorge Escurra fue criticado por quejarse de la "mala onda" de una chica que vende tragos en calle Palma. "Estoy ocupada ahora, permiso", le respondió.
Los hombres discutieron y uno de ellos apuñaló a su pariente, quien a pesar de ser llevado a un hospital, murió. El autor del crimen huyó y es buscado por la Policía.