Ycuá Bolaños. Foto: @CReligiosos Luego de salir de la Costanera de Asunción, donde se reunió con los jóvenes, Jorge Bergoglio se dirigió en papamóvil hacia el memorial del siniestrado Ycuá Bolaños, donde en 2004 murieron casi 400 personas.
Ahí lo esperaban fieles y víctimas desde la madrugada, quienes prepararon mensajes y actos culturales. Pero un incidente impidió que Francisco bajara del papamóvil. Varias personas sobrepasaron la valla de seguridad y coparon avenida Artigas, por lo que los guardias decidieron que no baje.
El papa se limitó a dar su bendición y avanzó rumbo al aeropuerto, donde le preparaban una despedida.
Las víctimas se llenaron de frustración, hubo llanto, queja y varios de ellos se descompensaron y tuvieron que ser llevados por bomberos para su atención.