El imponente retablo de maíz que adornó el altar del Papa en el predio de la Fuerza Aérea, causando la admiración de connacionales y extranjeros, hoy será desmontado. La obra del artista plástico Koki Ruiz, quien con maíz, calabazas y frutos secos maravilló al mundo entero, quedará en la historia como una de las más bellas creaciones durante la visita de Francisco a Paraguay, en julio de 2015.
Algunas partes del retablo serán conservadas, de alguna forma, o por lo menos por un tiempo. “Los cuadros de San Francisco y San Ignacio van a ir a la iglesia de la Encarnación, en Asunción. Yo me comprometí en eso con el arzobispo”, dijo Ruiz. Pese a que las imágenes irán desdibujándose con el paso del tiempo, los fieles de la parroquia capitalina decidirán cómo mantenerla el mayor tiempo posible.
Cruz de Francisco
La cruz va a ser llevada hasta una población campesina de Misiones, entre San Ignacio y Santa Rosa, como recuerdo de la visita del papa Francisco. “Vamos a vestirla con frutos naturales de la época. Por ejemplo, cuando se coseche maíz, vamos a vestirla de maíz; cuando se coseche andaí, vamos a colocarle andaí; por la primavera, vamos a ponerle flores”, explicó el artista.
En cuanto al maíz utilizado, será distribuido entre la gente de Misiones. Sobre los cocos, Koki explicó que de por sí se van pudriendo, por lo que será imposible que la gente retire las intenciones que plasmaron en los frutos. El Papa felicitó a Ruiz por su hermosa obra y le dijo que se emocionó al verla.
Con música despidieron el retablo
Pese a la lluvia y la humedad, los fieles asistieron anoche al predio de la Fuerzas Aérea, en Ñu Guasu, en donde se realizó un concierto gratuito para despedir el retablo que hoy será desmontado. El acto inició a las 19.30 y contó con la participación del Coro Espíritu Santo, Ricardo Flecha, el Coro Paraguayo de Cámara, la Orquesta Filomúsica de Asunción, entre otros artistas, bajo la dirección de Luis Szarán.