
Un chico de 14 años murió ayer en Santa Fe, Argentina, por una infección generalizada a raíz de la colocación de un arito. El adolescente fue internado en el Hospital de Niños “Dr. Orlando Alassia” de la ciudad argentina, pero los doctores no pudieron salvarlo porque su cuadro ya era grave.
“Tuvo una infección luego de colocarse un arito, un piercing, en el lóbulo de la oreja. Ahí estuvo el ingreso del germen”, explicó Osvaldo González Carrillo, director del centro médico. Añadió que, a horas de colocarse el accesorio, el joven comenzó a tener dolores de cadera.
Luego, su cuadro empeoró y falleció en 48 horas. “No son casos frecuentes y tampoco que hagan infecciones tan severas. Pero, lamentablemente, en una semana hizo una infección generalizada y falleció”, dijo el profesional.
“Esto nos llama a la reflexión. Si uno decide colocárselo debe tener las medidas higiénicas necesarias para hacerlo. El piercing rompe la barrera de defensa del cuerpo y hace más posible las infecciones”, culminó.