Un caso insólito se dio en Turquía y generó revuelo en redes sociales. Un hombre de Estambul firmó un acuerdo de divorcio con la que era su pareja, pero había un dilema con todo esto, ambos comparten dos gatitos, a quienes han criado como si fueran sus hijos y no podía desentenderse de ellos como si nada.
Entonces, el hombre, cuya identidad no trascendió, se comprometió a pagar la prestación alimenticia de las dos mascotas, durante los próximos 10 años. El exmarido, que pidió la separación por “incompatibilidad grave”, aceptó que su exmujer se quede con sus “hijitos felinos”, pero deberá enviarle 210 euros (G. 1.800.000 al cambio en Paraguay) cada tres meses para cubrir los gastos de purina, peluquería, veterinaria y otros más.
El arreglo fue aplaudido por los animaleros principalmente, y aseguran que queda como precedente para que otras parejas puedan llegar a término similares cuando acaba la relación y hay mascotas de por medio.
Otros casos
Ya se dieron antes casos similares, en EE. UU., la conocida actriz Shantel VanSanten firmó un acuerdo que fija una multa de 10.000 dólares diarios si no cumple con la custodia de su perro. Ellos tienen la custodia compartida y si ella no lo devuelve a tiempo a su exesposo Víctor Webster debe pagar ese monto. Por otro lado, en Nueva York, un abogado demandó a su expareja por la tenencia de su caniche, reclamando 200.000 dólares; y en otra localidad yanqui un tribunal resolvió la disputa por un “goldendoodle” como si fuera la custodia de un hijo.