Dos policías municipales de Avellaneda fueron detenidos, acusados de liderar una banda que vendía drogas en distintos barrios del sur bonaerense. Uno de ellos, Jerónimo Menéndez, de 37 años, se había destacado en la academia de formación por su inteligencia, era quien recibía los pedidos en su celular.
Delivery seguro
Si podía en ese momento, hacía las entregas solicitadas con el patrullero y si no, mandaba a los clientes a su casa, a tratar con Marcela, su esposa, quien también está detenida. Brian Martin, el otro agente policial y socio en el “negocio”, está prófugo; en su casa encontraron armas de gran calibre con numeración limada, balas, chalecos antibala y hasta estrellas ninja, según altas fuentes del caso.
Una verdadera mafia
Además de vender drogas, Menéndez es sospechoso de comercializar armas, liberar zonas, extorsionar a motociclistas sin casco, “proteger” comercios sin habilitación y a vendedores menores de droga, pedir parte de la recaudación a limpiavidrios y cuidacoches y prestar plata a sus compañeros a tasas usurarias.