En una ciudad española se desató el escándalo luego de que un pa’i se vio obligado a renunciar por celebrar una misa de primera comunión estando ebrio.
El cura en cuestión es Juan Rubio, el sacerdote de la parroquia de Nuestra Señora de la Consolación, en la localidad de La Higuera, municipio de la provincia de Jaén, quien el pasado 22 de mayo, durante la misa, tomó un trago del cáliz y dijo: “Para lo que me queda en el convento...”.
No terminó de decir la frase cuando lanzó un feroz eructo al estilo Barney, el borracho de Los Simpsons, y los feligreses se rieron a carcajadas. “Oremos”, continuó el pa’i.
Pero ese momento no quedó entre los que asistieron a la celebración sino que se hizo viral en un video de TikTok.
El sacerdote decidió presentar su renuncia, que le fue aceptada por el obispo de Jaén, y pidió disculpas. Señaló además que se pondrá en manos de profesionales.
Algunos católicos pertenecientes a la iglesia lamentaron lo sucedido y brindaron su apoyo al padre Rubio. “Eso no lo hace mala persona”, dijeron.