Un sacerdote brasileño fue asesinado a sangre fría. Los malandros querían su vehículo para venderlo en Paraguay.
La víctima es el padre Alexsandro da Silva Lima, de 44 años, quien se desempeñaba como párroco de la Parroquia Nuestra Señora Aparecida en Dourados , Mato Grosso do Sul y era bastante querido. La ciudad está a 116 kilómetros de Pedro Juan Caballero.
Fue asesinado en su casa en horas de la noche del viernes, según la policía, pero su cuerpo apareció recién al día siguiente envuelto en una alfombra en una zona boscosa.
Por el crimen fueron detenidos dos jóvenes de 18 años, Leanderson de Oliveira Junior y João Victor Martins Vieira, además de tres adolescentes.
Según la investigación de la Policía Civil, Leanderson planeó matar al cura, junto a un cómplice de 17 años para poder robar su automóvil. Ya tenían un comprador en Paraguay e iban a vender por 40 mil reales (54 millones de guaraníes), según el portal G1.globo
También sustrajeron electrodomésticos, utensilios de cocina, vino, teléfono celular y hasta una garrafa de gas. El padre fue atacado con un mazo en la cabeza y luego fue apuñalado en el cuello y pecho. El adolescente de 17 años admitió que remató al sacerdote al ver que aún respiraba, alegando estar borracho. Tuvo una muerte violenta.
Policía descarta versión de de los malandros
El principal sospechoso, Leanderson de Oliveira Junior, afirmó en su testimonio que mató al padre Alexandro da Silva Lima porque el sacerdote habría intentado abusar sexualmente de él. Sin embargo, la Policía Civil descartó esa versión. Lucas Albé Veppo, delegado de la policía, señaló que no existe ninguna prueba que respalde esa acusación y que el crimen fue planificado para robar el auto y venderlo en PJC. La supuesta agresión sexual solo fue para una estrategia procesal.