El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, de 79 años, asustó a sus seguidores luego de que se diera la información de que tuvo que ser operado de urgencia para drenar una hemorragia intracraneal que se dio por una caída que sufrió en octubre pasado.
Pero desde su cuenta de X pidieron que no cunda el pánico, porque afortunadamente, aunque aún está delicado, el mandatario se recupera en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Sírio-Libanés de forma favorable.
El informe médico señala que el mandamás del país vecino se está recuperando “sin problemas” y está “bien”.
Todo fue muy rápido, ya que el líder progresista acudió a un centro médico en Brasilia por lo que parecía ser un simple dolor de cabeza, pero la intensidad era lo que le preocupaba. Entonces, le hicieron una resonancia magnética y pillaron ahí la hemorragia.
Allí urgente fue llevado a la ciudad de San Pablo, donde pasó por el quirófano para que la hemorragia pueda ser drenada.
“La cirugía transcurrió sin problemas y, en este momento, el presidente se encuentra bien, bajo monitoreo, en una cama de cuidados intensivos”, señaló el centro médico.